Los dos principales factores que tienes que tener en cuenta a la hora de determinar la distancia óptima para colocar la TV son el tamaño y la resolución.
Ciudad de México, 21 marzo (TICbeat/SinEmbargo).- Por fin tienes en casa tu flamante pantalla nueva, y cuando la estás instalando en su lugar te llegan las dudas. La más frecuente de ellas es la siguiente: ¿A qué distancia tengo que colocar el televisor que acabo de comprar para que se vea adecuadamente? Por muy pequeño o muy grande que sea tu salón (o tu habitación), la distancia a la que ves la tele es fundamental.
Antes de comprar una TV nueva, lo ideal es que midas la distancia que tienes disponible desde el sofá u otro punto desde el que la vas a ver hasta el sitio en el que vas a poner el aparato. Conocer este dato de antemano te permite calcular cuáles son las dimensiones óptimas dependiendo de la resolución de la pantalla, lo que te ayudará a seleccionar las pulgadas que tiene que tener el televisor.
No obstante, en muchas ocasiones nos dejamos llevar por otros criterios para elegir la TV y no tenemos en cuenta el tamaño de la pantalla hasta que llegamos a casa. Si este es tu caso y ahora que ya lo tienes quieres saber a qué distancia tienes que colocar el televisor, toma nota porque te explicamos qué es lo que tienes que tener en cuenta para elegir la mejor ubicación del aparato en función de su tamaño y su resolución.
Los dos principales factores que tienes que tener en cuenta a la hora de determinar la distancia óptima para colocar la TV son el tamaño y la resolución. Por un lado, cuanto mayor dimensión tenga la pantalla, más lejos te tendrás que colocar para poder ver la imagen adecuadamente.
Si la tele está demasiado lejos te perderás detalles de programas, películas y series, no leerás bien los subtítulos y no disfrutarás de una experiencia tan inmersiva. Por el contrario, si está demasiado cerca tendrás que forzar el cuello para abarcar toda la imagen y verás los píxeles individuales, por lo que no disfrutarás de una experiencia óptima.
Además del tamaño del televisor en pulgadas, otro de los factores que tienes que tener en cuenta es la resolución de la pantalla. La TV se compone de píxeles individuales que forman la imagen que se reproduce. Cuanto mayor es la resolución, mayor es el número de píxeles que tiene la pantalla, de manera que aumenta el nivel de detalle y es posible sentarse más cerca con una visualización óptima.
En el siguiente gráfico elaborado por el portal Rtings.com puedes ver la distancia recomendada para colocar el televisor dependiendo del tamaño y de la resolución de la pantalla.
DISTANCIA ÓPTIMA PARA VER UN TELEVISOR FULL HD O 4K
Como has podido ver en el gráfico anterior, cuanto mayor es la resolución del televisor, mayor es la densidad de píxeles, lo que significa que te puedes sentar más cerca con el mismo tamaño de pantalla porque tiene un mayor nivel de detalle.
En la actualidad, las resoluciones más habituales son Full HD (1920 x 1080 píxeles) y 4K UHD (3840 x 2160 píxeles), por lo que vamos a centrarnos en ellas para determinar cuál es la mejor distancia entre la TV y el sofá.
En estos casos, hay que tener en cuenta que si la pantalla está demasiado lejos, nuestro ojo no será capaz de apreciar la riqueza de detalles que nos ofrece una resolución mayor. Por tanto, si no puedes sentarte lo suficientemente cerca, no merece la pena comprar una TV 4K UHD, puesto que tu ojo no podrá apreciar la diferencia en comparación con una Full HD.
En la siguiente tabla puedes ver la distancia óptima a la que tienes que colocar tu TV atendiendo a sus dimensiones y resolución, según el portal Rtings.com.
En Internet encontrarás infinidad de calculadoras que te permiten introducir la distancia que hay entre tu TV y tu sofá para saber cuál es el tamaño de pantalla más adecuado atendiendo a su resolución.
No obstante, tienes que tener en cuenta que todos estos cálculos son aproximaciones cercanas, ya que hay otros factores que entran en juego a la hora de ver la televisión y que pueden variar la distancia óptima para cada persona.
Detalles como la agudeza visual de cada uno, la iluminación de la estancia en cada momento o la edad del espectador pueden producir ligeras variaciones en la separación más adecuada entre el televisor y el sofá.